Iquitos es tierra de alegría, calor y sabor. Al ritmo de la cumbia y el ruido de los mototaxis, esta ciudad recibe al viajero con el corazón abierto, una naturaleza exuberante, atardeceres de ensueño, costumbres exóticas y misterios ancestrales. La Amazonía peruana está llena de contagiante felicidad para los espíritus aventureros.
Se trata de una de las ciudades más visitadas por turistas peruanos y extranjeros. Además de contar con impresionantes destinos, es el principal punto de partida para conocer el río Amazonas, una de las Siete Maravillas Naturales del Mundo. A continuación, te contamos 5 razones por las que debes visitar la capital de la Amazonía peruana.
Un viaje en el tiempo
La bonanza que vivió Iquitos a finales del siglo XIX con el auge del caucho se ve aún reflejada en las fachadas de las casonas del centro histórico. Esta época de gran desarrollo económico y comercial llevó a la ciudad a convertirse en el primer puerto fluvial del oriente peruano. Se construyeron mansiones y palacios de estilo europeo cuyas fachadas eran vestidas de azulejos arábigos e italianos.
Entre estas edificaciones están el Hotel Palace, la Casa Morey y la Casa de Fierro, considerados íconos culturales de la ciudad.
El pintoresco Malecón Tarapacá, a orillas del río Amazonas, es también evidencia de la hermosa arquitectura que caracterizó a la época de la fiebre del caucho. En sus alrededores, se puede observar bellísimas residencias de estilo Art Nouveau, llenas de azulejos, como la Casona Hernández, junto a plazuelas y jardines, una glorieta y un monumento a la biodiversidad y a los mitos de la selva. Desde aquí podrás apreciar un impresionante atardecer amazónico.
Aventura inolvidable
La maravillosa experiencia de descubrir el Amazonas se inicia desde el avión a pocos minutos del aterrizaje en Iquitos. Desde las alturas podrás contemplar los meandros del gran río dorado, el cual se asemeja a una anaconda gigante. Si tu vuelo llega de día, elige sentarte al lado de la ventana ya que verlo desde el cielo es un espectáculo imperdible.
Son muchas las alternativas para que puedas navegar por el río. Desde pequeños barcos que brindan servicios con visitas a diferentes destinos y un programa lleno de actividades, hasta grandes cruceros con todas las comodidades que garantizan una aventura única y especial.
Gastronomía exótica y deliciosa
Uno de los mayores tesoros de Iquitos es sin duda su comida. Un abanico de sabores, aromas y texturas que conquista el paladar. A través de ancestrales recetas y secretos propios, los pobladores han impulsado el turismo culinario ofreciendo platos originales y representativos que no debes dejar de probar en tu visita a esta ciudad.
Y es que no hay viajero que no quede rendido ante un exquisito Tacacho con cecina o una suculenta Patarascha, acompañada de una fresca Ensalada de chonta y un agradable Jugo de cocona. Para los más curiosos, hay otros potajes incluso más exóticos como el Chicharrón de lagarto y el Suri, este último es un gusano muy sabroso que se reproduce en el tallo de los árboles del aguaje.
Un paraíso de flora y fauna
Iquitos te da la oportunidad de disfrutar y entrar en contacto con la naturaleza. La ciudad alberga innumerables lugares y atractivos donde podrás observar toda clase de flora y fauna en su hábitat natural. Uno de ellos es el Mariposario Pilpintuwasi, hogar de múltiples especies de mariposas y también centro de rescate de animales en estado de vulnerabilidad.
Otro destino natural es el Complejo Turístico de Quistoccocha. Ubicado alrededor de la laguna que lleva el mismo nombre. Se trata de un espacio de conservación y cuidado del medio ambiente, siendo uno de los atractivos más importantes y visitados de la ciudad. Aquí podrás disfrutar de un paseo en bote, visitar el zoocriadero y recorrer a pie el extenso bosque natural que rodea este lindo lugar.
Cultura viva
Otra de las razones por las que debes visitar Iquitos es la posibilidad de realizar turismo vivencial. A lo largo del río Amazonas existen varias comunidades nativas como los Boras y los Yaguas, que tienen profundas raíces históricas y culturales. Son los guardianes del bosque y de la naturaleza, porque de ella obtienen todo lo necesario para su supervivencia.
A ritmo de bailes y cantos tradicionales, te dan la bienvenida para luego mostrarte sus rituales y costumbres. Los escucharás hablar en su idioma, te invitarán a danzar con ellos y te enseñarán sus productos artesanales y textiles, los cuales puedes adquirir a distintos precios.
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Fuentes: Iquitostravelguide / Yakumamatours / Elviajerofisgon / Tendenciashoy / Treehouselodge
Artículo original de peru.travel
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